Falsos mitos del humo de segunda mano
MITO 1: Si coloco en casa filtros o purificadores de aire eliminaré el humo del tabaco
Los purificadores y los filtros del aire no protegen frente al humo del tabaco, los ambientadores sólo enmascaran el olor.
El humo de segunda mano está formado por partículas y gases. Los filtros reducen las partículas pero no pueden eliminar los gases. Esto hace que muchos de los componentes tóxicos y cancerígenos permanezcan en el ambiente y, por tanto, el riesgo de enfermedades relacionadas con el tabaco.
MITO 2: Si fumo cuando mi familia no está en casa o en el coche, no les hago daño
Puede que intentes proteger a tus hijos y el resto de tu familia fumando cuando ellos no están, pero el humo de segunda mano permanece mucho más tiempo de lo que dura el cigarrillo. El humo de segunda mano persiste contaminando el ambiente y sus residuos se depositan en el polvo y las superficies, así puede durar varias semanas, incluso meses.
MITO 3: Si fumo en otra habitación, no perjudico a nadie
El humo de segunda mano se difunde de una habitación a otra, incluso si la puerta está cerrada. El humo permanecerá en la zona bastante tiempo y sus agentes tóxicos quedarán impregnados en alfombras, cortinas, ropa y demás accesorios del hogar.
MITO 4: Abriendo las ventanas o usando ventiladores puedo eliminar el humo de casa o del coche
Numerosos estudios han mostrado que no existe un nivel de ventilación suficiente para eliminar por completo el humo de segunda mano y los riesgos que este genera. Además, las corrientes de aire pueden hacer fluir el humo, favoreciendo que contamine otras zonas o aumentando la exposición de otras personas.